Por Gregorio Barreto Viñoly
Homenaje a Don José Antonio Rodríguez González por la distinción ‘Viera y Clavijo’
En la noche del día 9 de junio actual tuvo lugar, en el emblemático marco del Auditorio de los Jameos del Agua, un memorable acto muy bien organizado, contando con un amplio ascensor para desplazar personas con problemas de movilidad, con una asistencia de más de doscientas personas, para homenajear al maestro natural y vecino de este municipio, Don José Antonio Rodríguez González, hijo de Don José Domingo Rodríguez Betancor y de Doña Antonia González Acosta, por haber obtenido recientemente del Gobierno de Canarias, la distinción ‘Viera y Clavijo’ por su destacada labor en el desempeño de su trabajo profesional y correspondiente a las distinciones del año 2015, siendo esta la doceava distinción que se ha concedido a profesorado de la Educación de Lanzarote y la tercera de Haría, simbolizada en una preciosa medalla que ya habían obtenido anteriormente Doña Sebastiana Perera Brito y Don Joaquín Pérez Betancor.
Ese narrador considera que se trata del acto más bonito y fino que haya visto personalmente, con una gran intervención especial de personas valiosas de la isla de Lanzarote, y muchas del municipio de Haría, y con un tremendo halago al homenajeado, hasta el punto de que a veces se llegó a pensar que le parecía que lo estaban subiendo a los Cielos.
El acto fue muy bien presentado por el natural de Haría, actual director de Educación de Lanzarote, Don Mario Pérez Hernández, haciendo un muy bonito detalle de su quehacer o semblanza el también natural de Haría, exinspector de Educación, hoy juez de Paz, Don Rafael Curbelo Armas, haciendo saber de sus buenas notas en sus estudios, con muchos notables, sobresalientes y matrículas de honor, por lo que consiguió al final el entrar en la Escuela de Magisterio, por acceso directo, sin tener que someterse a oposiciones, y siendo además una persona sencilla, amable y colaboradora.
Don José Antonio ha sido un profesional de la Educación muy responsable de sus actos, persona muy sencilla, que con tal de colaborar para que salieran las cosas no vacilaba en remangarse, coger la fregona o hacer lo que fuera, y si no podía llegar a su hora a casa, llamaba a su esposa, Jacinta Placeres Betancor, que lo acogía con su santa paciencia. Fue destacada la presencia del también hariano Don Juan Rafael Bailón Casanova, inspector de Educación y siendo hoy el Director General de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa del Gobierno Canario, que ha escalado con su sabiduría y buen hacer. La mesa estaba integrada por el alcalde Don Marciano Acuña Betancor, Don Juan Rafael Bailón Casanova, por el Gobierno de Canarias, el homenajeado Don José Antonio Rodríguez González, el presentador del acto Don Mario Pérez Hernández y la consejera del Cabildo Insular Doña Carmen Rosa Márquez. El homenajeado recordó a sus padres, Don José Domingo y Doña Antonia, lamentando muchísimo que no vivieran para presenciar este acto, a cuya emoción se unieron varios de los intervinientes, como también lo lamenta este narrador.
El alcalde, al final, le hizo entrega del pin de oro y de una placa conmemorativa del acto, para agradecimiento de él, de su esposa y de toda su familia, hallándose presente su suegro, Don Pedro Placeres Alpuín, a todos los cuales reiteramos la felicitación por la distinción. Se trata de un acto en que el homenajeado, sintiéndose muy arropado y halagado por el montón de intervinientes y por el público en general, vino a demostrar su sentimiento interior, en el sentido de que habiéndosele considerado un buen profesional de la Educación, lo que más le halaga, incluso en su corazón, es el haber sido considerado, además, como una persona buena, servicial y colaboradora. Es de destacar el que su amigo Emilio Rodríguez Perdomo viniera ex profeso desde Las Palmas para estar en el acto, con quien compartió pesca, bolas y amistad en Punta Mujeres. Yo creo, al fin, que el trabajo bien hecho acaba recibiendo un premio. Felicidades.
